Queridos hermanos:
Ya hemos llegado a otro año y debemos agradecer al profundo amor del universo por darnos esta oportunidad.
Todas sus fuerzas han de ser positivas y armoniosas de amor y de paz.
Su lema para el presente año debe ser, servir siempre, amar siempre, y lo más importante tolerar siempre.
No es importante que los demás crean o participen de vuestras ideas. Con vuestro ejemplo bastará para darles una forma de vida diferente. Acepten el cambio ya, todo el tiempo estáis cambiando pero que ese cambio sea para el bien nuestro y de la humanidad.
No existe Dios sin verdad ni amor, si ustedes no lo practican ¿Dónde está su Dios interior? El es el que todo lo sabe y el que mueve los hilos de vuestro destino. De nuestra forma de actuar depende que todo lo demás: la prosperidad, la salud, el amor y la armonía se les otorgue por añadidura.
Vivan el amor y sean ejemplos vivientes, sean soles radiantes y llenos de luz.
Con amor infinito.
OXALC