Los invito a que me acompañen a hacer un recorrido en esta nota, sobre los mitos y verdades que existen acerca del consumo de pan…
Verdadero. El pan es una fuente de carbohidratos complejos, una fuente de energía para el metabolismo y el funcionamiento del sistema nervioso. También contiene vitaminas B1, B6 y E, y minerales como potasio, magnesio y fósforo. Siempre elijan el pan integral.
Falso. El pan se deja de lado cuando se hace dieta, pero no porque necesariamente engorde, sino por razones de cantidad y equilibrio. El pan hace engordar cuando se agrega a otro almidón. Por ejemplo, comer una rebanada de pan con pasta o papas sí engorda.
Verdadero y falso. El pan blanco tiene un índice glucémico alto. El índice glucémico permite comparar porciones de alimentos en función de su capacidad para elevar los niveles de azúcar en sangre, lo que conduce a un pico de insulina responsable de la sensación de hambre. Por lo tanto, es mejor preferir el pan integral que tiene un IG (índice glucémico) más bajo.
Verdadero. Los cereales integrales contienen muchos azúcares, por eso, traten de no ponerle al pan algo dulce como Nutella. En cambio, desayunar dos rebanadas de pan integral con una rebanada de queso vegano, mantequilla vegana, o palta, es muy saludable.
Verdadero. La fibra del pan contribuye al buen funcionamiento del tránsito digestivo. Sin embargo, no se deben reemplazar las frutas y verduras con el pan, ya que éstas son esenciales y contienen una gran cantidad de fibra. Por otro lado, las personas intolerantes al gluten sí pueden sufrir problemas digestivos si consumen pan.
Verdadero. Si tienen hambre, comer una o dos rebanadas de pan no afectará el peso, siempre y cuando no las acompañen de azúcares o grasas (como mantecas).
Verdadero. Independientemente del tipo de pan (a excepción de los panes especiales: con tocino, chocolate, etc.), el pan contiene muy poca grasa.