Hasta hace unos pocos años, para la mayoría de los peruanos el consumo de arándanos era una experiencia nueva; mientras que en Chile, nuestro país vecino, ya venía cultivándose desde mediados de los años 80 y estaba posicionado como el mayor productor de arándanos en Sudamérica. En el Perú, el primer campo cultivado de arándonos se inició en el año 2008.
El arándano azul es uno de los reyes de la naturaleza. Su color azul intenso se debe a un pigmento llamado antocianina, un compuesto fenólico que se encuentra en grandes cantidades en esta deliciosa fruta. Son muy populares en la medicina herbolaria porque contienen poderosos ingredientes activos naturales. Los estudios demuestran su gran poder antioxidante que brinda múltiples beneficios a nuestro organismo.
Esta especie es originaria de Estados Unidos, país que es también el mayor productor de arándanos en el mundo.
Su nombre científico es Vaccinium-corymbosum.
Los arándanos tienen excelentes propiedades para la salud: cuenta con menos de 80 calorías por taza y, como ya lo hemos mencionado, contiene elevados niveles de antioxidantes. Una porción contiene casi el 25% de las necesidades diarias de vitamina C. Son una buena fuente de fibra y una excelente fuente de manganeso.
De acuerdo con el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), los arándanos están entre los alimentos con mayor actividad de antioxidantes por porción. Además, los arándanos reducen el daño del ADN, que puede ayudar a proteger contra el envejecimiento y el cáncer. También nos protegen del colesterol malo en la sangre.
Según algunos estudios, consumir una pequeña porción de bayas al día puede ayudar a prevenir la presión arterial elevada, el azúcar en la sangre elevada, el exceso de grasa corporal en la cintura y los niveles anormales de colesterol.
Lo podemos encontrar en bioferias o mercados, y su precio no es muy elevado.